En el sector industrial del Barrio Colombia, Medellín, donde cada día entra y sale mercancía de todo tipo, un operativo silencioso terminó convirtiéndose en la noticia del día. La bodega intervenida parecía, desde afuera, un local más del corredor comercial; sin embargo, por dentro guardaba una operación que llevaba meses bajo la lupa de las autoridades.
La Policía Fiscal y Aduanera, en coordinación con la Fiscalía y la DIAN, llegó en horas de la mañana para ejecutar una diligencia de registro que hacía parte de un seguimiento contra el contrabando en Medellín. Lo que encontraron confirmó las sospechas: pilas de cajas, selladas y apiladas hasta el techo, con 6.641 pares de calzado ilegal que imitaban marcas de alto consumo.
En el inventario preliminar quedó claro el tamaño del hallazgo: el cargamento superaba los 1.716 millones de pesos en avalúo comercial.
Según los investigadores, la mercancía había ingresado al país sin cumplir requisitos aduaneros y estaba lista para ser distribuida durante la temporada decembrina en puntos de venta informales.
El decomiso no solo representa un golpe al comercio ilegal. De acuerdo con la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, el cargamento hacía parte de las economías criminales de las estructuras “Caicedo” y “La Terraza”, que han encontrado en el contrabando una fuente constante de financiación para sus actividades ilícitas.
Mientras las autoridades realizaban el conteo de las cajas dentro de la bodega, el movimiento afuera crecía. Comerciantes de la zona observaban desde los andenes, algunos preocupados por lo que esto significaba para el comercio del sector, otros analizando cómo este tipo de hallazgos refleja la profundidad del mercado ilegal que se mueve en la ciudad.
El brigadier general William Castaño Ramos, comandante de la Policía Metropolitana, indicó que estas operaciones buscan frenar el ingreso de productos fraudulentos y proteger la economía legal que compite en desventaja frente a mercancías sin controles ni impuestos.
La bodega quedó asegurada mientras avanzan las investigaciones para establecer los responsables de la importación, almacenamiento y distribución del calzado. El operativo, según las autoridades, hace parte de una ofensiva más amplia que continuará durante toda la temporada de fin de año.





