Delincuentes hurtaron a dos clientes de un negocio del barrio Niquía, en Bello, cuando esperaban un pedido para comer durante la noche.
Cuando ya se disponían a salir, fueron abordados por los ladrones. Sin embargo, una de las víctimas logró escapar. Mientras que su amigo fue despojado de sus pertenencias.
Testigos aseguraron que a los restaurantes no regresaron por la falta de seguridad y en algunos casos, llaman a hacer el pedido, van hasta el sitio o piden domicilios.
Autoridades investigan, paso a paso, los hechos y tratan de rastrear a los responsables de los hurtos.
