Un hombre agregó a una “princesa paisa” por redes sociales y la invitó a salir. Cuando se conocieron, una de las mujeres llevó a otra amiga, se tomaron varias copas de licor en una exclusiva y famosa zona de El Poblado.
El rubio estaba muy “contentico” porque había conquistado a dos bellas damas, en Medellín, se tomó varios energizantes, compró los preservativos y se las llevó hasta su castillo con una sonrisa de oreja a oreja.
Al llegar al lugar, más esperado por ambas partes, subieron las escaleras, siguieron la fiesta, bailaron y bebieron hasta que las mujeres le aplicaron a la copa de su pretendiente una pequeña dosis de escopolamina.
La víctima solo recuerda que las mujeres tocaron una baldosa con un tacón, se abrió una puerta y de un momento a otro les cambió su mirada, pues tenían las cejas pintadas como las princesas malas de los cuentos de los Hermanos Grimm.
Al ver que el norteamericano cerró los ojos, como para dormir dos días seguidos, comenzaron a desfalcar sus tarjetas.
Las mujeres pidieron un carro y salieron con los objetos de valor, cadenas de oro y dinero, en su bolso.
Esta no es la primera vez que estas chicas aparecen en Prensapaisa.com. En varias oportunidades los extranjeros las buscan, por cielo y tierra, para que les devuelvan sus documentos y poder salir de la ciudad para regresar a su país natal.