Lo que debía ser una aventura por la ciudad de la eterna primavera terminó en una pesadilla para un turista alemán quie nfue secuestrado luego de ser engañado por dos mujeres en el sector del Parque Lleras, en El Poblado, Medellín.
Según la investigación, las mujeres lo abordaron de manera amable y lo convencieron de acompañarlas a un sitio “más tranquilo”. Sin saberlo, el extranjero cayó en una trampa que lo llevaría hasta una vieja casa en el barrio Prado Centro, donde fue retenido contra su voluntad, golpeado y despojado de sus pertenencias, valoradas en más de 2.000 euros.
Allí comenzó su calvario: durante 36 horas, los secuestradores realizaron llamadas extorsivas a su familia en Alemania, exigiendo 5.000 euros a cambio de su libertad. Incluso lograron recibir parte del dinero antes de que la embajada alemana en Colombia alertara a las autoridades.
Fue entonces cuando el Gaula Metropolitano, en coordinación con la Policía Nacional, la Fiscalía y la Alcaldía de Medellín, activó un operativo relámpago. Gracias al rastreo de llamadas y labores de inteligencia, las unidades llegaron hasta la vivienda donde el extranjero permanecía cautivo.
En una acción rápida y precisa, los agentes liberaron al turista y capturaron en flagrancia a seis personas, entre ellas dos mujeres, tres hombres y un adolescente de 14 años.
Durante la diligencia se incautaron cuatro teléfonos celulares y se recuperaron objetos personales de la víctima, entre ellos su teléfono y una tarjeta de crédito. Los capturados fueron dejados a disposición de la Fiscalía General de la Nación, donde enfrentarán cargos por secuestro extorsivo agravado, hurto calificado y utilización de menores para delinquir.
“Cuando lo sacaron, el hombre estaba en shock. Apenas podía hablar, pero agradeció entre lágrimas el rescate”, contó uno de los investigadores que participó en el operativo.
Este caso ha causado gran impacto entre los ciudadanos y el sector turístico, que pide mayor seguridad para los visitantes extranjeros. Sin embargo, también se resalta la rápida reacción de las autoridades y la coordinación con organismos internacionales.
El rescate del turista alemán no solo fue un golpe al crimen, sino una muestra de que cuando hay unión y acción, la vida siempre tiene una oportunidad más.
